La Cala en Brut es una cala pequeñita al oeste de la isla cerca de Ciutadella absolutamente diferente, ideal para los que quieran practicar saltos y para los que no disfrutan de la arena. Se trata de una casi piscina natural rodeada por acantilados de rocas sobre las que hay plataformas de hormigón y roca pulida para tomar el sol; están comunicadas entre sí por pequeños caminillos y escaleras talladas en la roca.
Las plataformas están a diversas alturas sobre el nivel del mar y sobre ellas hay espacio para tumbarse y tomar el sol y cuando uno quiere refrescarse no tiene más que saltar al agua, eso sí, con precaución que aunque hay bastante profundidad, entre cuatro y cinco metros, el fondo también es rocoso.
Aunque los saltos no son obligatorios, hay escalinatas que llevan hasta el agua para lo que no quieren la experiencia de los saltos. Pero para los que le gusta volar hasta el agua, hay un punto más alto que los demás, desde la zona conocida como “la cueva†donde la altura alcanza los diez metros.
Obviamente, si quieres realizar saltos, deberás observar un mínimo de medidas de seguridad, como comprobar que no hay nadie debajo y tener cuidado al acercarte al borde, ya que las rocas mojadas pueden resultar resbaladizas; si no tienes mucha experiencia mejor empezar por las bajitas.
Para llegar, desde Ciutadella tienes la carretera a Cala en Blanes, la antigua, que dispone de carril bici y pasa por el faro de Sa Farola bordeando la costa; también puedes coger la carretera dela Torre del Ram, que llega casi hasta Cala en Brut.
Marga G.-Chas Ocaña